DIANA RICHARDSON / JANET MCGEEVER
Las mujeres vivimos muy conectadas a nuestro cuerpo a través de la menstruación, el embarazo, el parto, la maternidad y, posteriormente, la menopausia. Cada una de estas fases nos transforma, y la mayoría de ellas suelen ser motivo de celebración. Sin embargo, la menopausia nos lleva a creer que nuestros cuerpos se han deteriorado o son deficientes, en particular en términos de sexo e intimidad. Las maestras tántricas Diana Richardson y Janet McGeever nos muestran que, en contra de estas ideas negativas tan generalizadas, la menopausia contiene numerosos dones ocultos que ofrecernos si aprendemos a abrazar en lugar de suprimir los cambios propios de esta transición.